Logo Valiant Bursátil

Inversiones 04.08.25

Los CEDEARs que suben hasta 60 % anual son alternativas poco conocidas

Imagen de Inversiones 04.08.25

Quienes se dedican a “bucear en el océano de los CEDEARs” que cotizan en la Bolsa de Buenos Aires y que ya suman más de 1.000, suelen encontrar algunas perlitas ocultas o exóticas que pueden brindar rendimientos por demás interesantes.

De hecho, algunas de las que pueden responder a esta definición muestran subas en lo que va del año que en el mejor de los casos van del 30%, como el que representa una compañía dedicada a la computación cuántica al 60%, en el que replica la cotización del Ethereum.

Si bien el término “exótico” puede ser subjetivo en este mercado, ya que la mayoría de ellos representan acciones de empresas globales conocidas, hay algunos que podrían considerarse menos comunes o que ofrecen una exposición a sectores o estrategias más específicas.

Ejemplo claro de ellos son los CEDEARs de ETFs (Exchange Traded Funds), ya que representan una canasta de activos que replican un índice, sector, región o incluso commodities. Esto permite una mayor diversificación y exposición a mercados o temáticas que antes no eran accesibles directamente para el inversor minorista argentino. Entre otros, pueden mencionarse los siguientes:

  • ETFs que multiplican las variaciones diarias: el más buscado es el SPXL, que multiplica por tres la variación positiva o negativa del S&P500. Es de corto plazo.
  • ETFs Inversos: Un ejemplo es el SH, que está diseñado para subir cuando el S&P 500 baja, ofreciendo una forma de cobertura o de beneficiarse de caídas del mercado. Otro similar es el PSQ que replica el inverso del Nasdaq 100.
  • ETFs de Commodities: Por ejemplo, el SLV. Es el primer CEDEAR de un ETF de metales, que refleja el precio de la plata física. También se puede invertir en litio, a través del LAAC.
  • ETFs de Mercados Específicos: Como el FXI, que replica un índice con las 50 empresas más grandes de China o el EWJ de empresas japonesas.
  • ETFs de Temáticas Específicas: Se enfocan en sectores o estrategias particulares, como el ARKK, que invierte en empresas disruptivas en innovación o el VIG, en empresas con constantes aumentos de dividendos.
  • ETFs de Criptomonedas: tal es el caso del IBIT, que se ajusta al valor de Bitcoin y ETHA, con respecto al Ethereum.

Desde empresas de computación cuántica al comercio electrónico chino

Pero estos no están solos, pues también existen certificados de empresas de nicho o menos conocidas, que, aun siendo importantes en sus sectores, no son conocidas por el público en general. Ejemplos recientes de incorporaciones que podrían considerarse más de nicho incluyen:

ASML (ASML Holding): Fabricante europeo de equipos para la producción de semiconductores.

PDD (PDD Holdings): Un conglomerado chino de comercio electrónico (que incluye a Temu), quizás menos conocido que Alibaba o JD.com.

XPEV (XPeng): Fabricante de vehículos eléctricos inteligentes, compitiendo en un sector en auge pero con jugadores menos consolidados que Tesla.

Rigetti Computing (RGTI): Empresa de computación cuántica, un campo de alta tecnología y muy especializado.

Tempus AI (TEM): Big data e IA aplicados a la medicina, un sector específico dentro de la salud y la tecnología.

¿Por qué se consideran “exóticos” o menos comunes?

  • Menor liquidez: Algunos de estos CEDEARs, especialmente los de empresas menos conocidas o ETFs muy específicos, pueden tener un volumen de negociación más bajo en el mercado local en comparación con los CEDEARs de empresas como Apple o Google.
  • Conocimiento del subyacente: Requieren un mayor conocimiento del activo subyacente y del sector en el que opera la empresa o el ETF.
  • Volatilidad: Algunos pueden estar expuestos a mayor volatilidad debido a la naturaleza del sector (ej. tecnología disruptiva, mercados emergentes) o al ser instrumentos inversos.

En última instancia, quien esté interesado en invertir en estos CEDEARs “exóticos”, debe realizar una investigación exhaustiva sobre la compañía y su evolución en el mercado y si ello cuadra con los objetivos de inversión y tolerancia al riesgo.

iProfesional